This infographic presents the key findings of Round 39 of the mobility tracking component of the Displacement Tracking Matrix (DTM) programme in Libya.

This report presents the data on internally displaced persons (IDPs) and returnees between October – November 2021. The data and findings represent round 39 of the Displacement Tracking Matrix’s (DTM) Mobility Tracking. In Libya, no new mass displacements have been reported since June 2020, and throughout 2021 IDPs have continued to return to their communities of origin. Consistent with the annual trend, in this round of reporting, the numbers of IDPs within the country continued decreasing, with a parallel increase in the number of returnees.

As compared to an estimated 648, 317 returnees reported in round 38, the number of those identified during round 39 increased to 661,892 individuals. This indicates a slight increase in the percentage of those returning (2%), after a period of plateauing across the past 6 months.

La transhumance est une pratique de longue date en Mauritanie où elle a évolué au cours des dernières décennies telles que la raréfaction des ressources impliquant la redéfinition des routes empruntées par les troupeaux. Par conséquent, des conflits peuvent survenir lorsque les agriculteurs et les éleveurs transhumants. Dans le cadre du Suivi des Mouvements de Transhumance, l’OIM met en œuvre un système d’alerte qui a pour objectif de recenser les mouvements inattendus de bétail et les conflits ou catastrophes naturelles liés à l’utilisation des ressources naturelles et aux interactions entre agriculteurs et éleveurs, de comprendre les modes de résolution de conflits existants et d’informer les autorités compétentes, dans l’objectif de réduire les tensions dans les régions d’intervention. Ce tableau de bord présente les informations fournies par le biais de 21 informateurs clés, présents dans huit régions (Assaba, Brakna, Gorgol, Guidimakha, Hodh El Chargui, Hodh El Gharbi, Tagant et Trarza) pendant le mois de novembre 2021.

In order to gain a better understanding of mobility flows and trends, the International Organization for Migration (IOM) has implemented the Displacement Tracking Matrix’s Flow Monitoring (FM) tool at key transit points across the region. Flow Monitoring activities are conducted in close cooperation with national and local authorities as well as local partners. The Flow Monitoring tool consists of two main components: the Flow Monitoring Registry (FMR), which captures key data on the volume, origin, destination and mode of travel of mobility flows, and the Flow Monitoring Survey (FMS), individual surveys conducted with travellers to gather detailed information about the profiles, migration experience and intentions of migrants. Through these activities, the Flow Monitoring tool collects data on migration flows and trends, traveller profiles, migration journeys, and intentions of migrants, so as to obtain a better understanding of mobility.

In Mali, DTM conducts Flow Monitoring activities at seven Flow Monitoring Points (FMPs) located across six regions, in order to foster a better understanding of the numbers, trends, profiles, and journeys of migration flows crossing these points. 

This reports presents data collected through the Flow Monitoring Registry in December 2021. 

Afin de mieux comprendre les mouvements et tendances migratoires, l’OIM, à travers la Matrice de suivi des déplacements (Displacement Tracking Matrix, DTM), met en œuvre l’activité de Suivi des flux de populations (Flow Monitoring, FM). 

Le suivi des flux, qui est mis en œuvre en étroite collaboration avec les autorités et des partenaires nationaux et locaux, est composé de deux outils: l’enregistrement des flux (Flow Monitoring Registry, FMR), qui recueille des données clés sur l’ampleur, la provenance, la destination et les modalités des flux de mobilité, et les enquêtes individuelles (Flow Monitoring Survey, FMS), conduites auprès des voyageurs afin d’obtenir des informations sur les profils, parcours migratoires, et intentions des migrants. Le suivi des flux de populations récolte ainsi des données sur les flux et tendances migratoires, les profils des voyageurs et les parcours et intentions des migrants, afin de fournir une meilleure compréhension des mobilités. 

Au Mali, la DTM recueille des données au niveau de 7 Points de suivi des flux (Flow Monitoring Points, FMP), répartis dans 6 régions afin d’obtenir une meilleure compréhension de l’ampleur, des tendances, des caractéristiques socio-démographiques et des parcours des flux de voyageurs traversant ces différents points.

Ce rapport présente les données recueillies dans le cadre des activités d’enregistrement des flux durant le mois de  décembre 2021.

During the COVID-19 pandemic, IOM's Displacement Tracking Matrix (DTM), in collaboration with the World Health Organization (WHO), monitors the movements to and from Nigeria's Adamawa and Borno States in north-east Nigeria. Assessments are conducted at Points of Entry located along the border with Cameroon.

During the period 15 - 21 January 2022, 307 movements were observed at three Points of Entry in Borno state. Of the total movements recorded, 127 were incoming from the Far North Region in Cameroon and five from Ndjamena in Chad republic, while 170 outgoing movements were recorded from Borno State to the Far North Region in Cameroon and one outgoing movement to Lai in Chad republic.

Desde la declaración de pandemia por parte de la Organización Mundial de la Salud (OMS) en marzo 2020, países en Sudamérica iniciaron medidas que incluyeron, pero no se limitaron a: cuarentenas voluntarias y obligatorias; cierres de servicios considerados no esenciales; cierres fronterizos; emisión de permisos especiales de tránsito; creación de certificados de vacunación, solicitud de certificados de salud, uso obligatorio de cubrebocas; prohibición o limitación de agrupaciones de personas en el ámbito personal y profesional; entre otras.

Dichas medidas tuvieron un impacto en la llegada, tránsito e integración de personas migrantes, incluyendo las personas venezolanas que forman parte de la diáspora ocasionada por la crisis que desde hace unos años vive el país.

Como se describió en la Matriz del Monitoreo del Desplazamiento (DTM por sus siglas en inglés): Entendiendo el flujo migratorio venezolano en México1 del 2018, este país era visto como destino final de las personas venezolanas por contar con redes previas, la posibilidad de acceder a protección internacional y la posibilidad de una integración efectiva. Sin embargo, aunque la tendencia permaneció en el 2019, de acuerdo con las cifras de población publicadas por la Unidad de Política Migratoria en su boletín estadístico, el 2020 marcó un cambio. Esto debido al cierre de fronteras para cruces en Colombia y Panamá, quienes formaban parte de la ruta más común para llegar a México (DTM, 2018).

Debido a la grave afectación económica sufrida durante la COVID-19 y el revés en los procesos de integración en la región y en México, durante el 2021 se comenzó a detectar un aumento en los cruces irregulares con destino a Estados Unidos de América. De acuerdo con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza, el número de encuentros de personas venezolanas en la frontera aumentó de 1,311 en 2020 a 31,030 en lo que va del 20212 (Nationwide encounters. U.S. Customs and Border Protection. 2021, August 4).

El 28 de mayo de 2021 diferentes diarios informaron del cruce de más de 50 personas migrantes de nacionalidad venezolana en Ciudad Acuña, Coahuila. De acuerdo con la población local de Acuña y Piedras Negras que se entrevistó informalmente durante las visitas de campo, la población venezolana arriba a las ciudades para solicitar asilo directamente con la Oficina de Aduanas y Protección Fronteriza (CBP por sus siglas en inglés).

Derivado de la crisis global provocada por la pandemia del COVID-19, y recientes factores económicos y políticos, se han generado movimientos migratorios significativos desde Venezuela hacia otros países, particularmente en la región de América Latina y El Caribe. Esta nueva realidad es de especial interés para la Organización Internacional para las Migraciones (OIM), cuyo principal objetivo es promover una migración ordenada, segura y regular basada en el respeto de los derechos humanos de las personas migrantes. México ha experimentado un crecimiento en el número de personas venezolanas que arriban y deciden establecerse en el país. Según cifras del Instituto Nacional de Migración (INM), se ha incrementado en un 45.86 por ciento la población venezolana titular de un documento migratorio vigente del 2019 a marzo del 2021.

Con el fin de obtener datos que permitiesen conocer mejor las características de las personas venezolanas en México, OIM realizó encuestas a esta población en Ciudad de México y diferentes puntos identificados del país, mediante la herramienta denominada Matriz de Seguimiento de los Desplazamientos (DTM por sus siglas en inglés), un sistema utilizado para monitorear movimientos de población de forma sistemática, que además ayuda a identificar las necesidades de la población venezolana que actualmente se encuentra residiendo en el país. Dado el contexto actual de aislamiento por temas de protección a la salud frente a la amenaza que representa el COVID-19, se realizó solamente el levantamiento de datos a una pequeña muestra de la población venezolana que se encuentra viviendo actualmente en la Ciudad de México y en algunos otros puntos identificados de la República Mexicana. El ejercicio se llevó a cabo gracias a la coordinación y a la cooperación establecida con Agencias del Sistema de Naciones Unidas, diversas organizaciones no gubernamentales y redes de venezolanos organizados en México. Esta segunda ronda de DTM ha sido financiada con fondos del Bureau of Population, Refugees and Migration (PRM), del Gobierno de Estados Unidos de América. Este ejercicio resulta la continuación de la primera ronda de la DTM en México, la cual tuvo como objetivo monitorear los flujos y la situación general de los puntos de origen, tránsito y destino, así como recolectar información específica de las personas venezonalas residiendo en México

En el marco de la emergencia por la COVID-19, desde el 19 de marzo del 2020, el Gobierno de Costa Rica mantiene cerradas su frontera terrestre con Panamá para la Operación Binacional  Flujo Controlado, acordado así entre los gobiernos de Costa Rica y Panamá en la frontera de Paso Canoas para procurar una migración ordenada y segura de personas migrantes en situación de movilidad por América, se detuvo. A la fecha de este Informe, no se cuenta con una fecha aproximada para su reimplementación.​

Ante la presencia de este flujo migratorio irregular, desde el 24 de agosto de 2021, OIM Panamá ha publicado información sobre el flujo migratorio irregular en Darién, Panamá bajo el contexto de la COVID-19. A partir de esta información se ha identificado que durante el 2021 el flujo de personas en situación de movilidad por las Américas con destino hacia Norteamérica se encuentra en aumento: según datos del SNM, en el periodo comprendido entre agosto y noviembre de 2021, se ha registrado en la frontera entre Colombia y Panamá, el ingreso irregular de 126.675 personas migrantes de diferentes nacionalidades: Haití (62%), Cuba (13%), Chile (8%), Brasil (7%), República Bolivariana de Venezuela (2%), entre otros países del Sur de América, África y Asia.​

En Costa Rica, se ha identificado un aumento en la cantidad de personas migrantes del flujo migratorio que deciden quedarse en el país, principalmente personas originarias de Haití, que, en algunos casos, han solicitado refugio en el país ante la Dirección General de Migración y Extranjería (DGME). De acuerdo con datos de la DGME, durante mayo y noviembre 2021 se han realizaron 9.699 rechazos en Paso Canoas.​