México-Linea Base para el monitoreo de flujos y presencia de personas migrantes en la frontera sur #1 (Mayo, 2021)

En los meses de marzo y abril del 2021, el Gobierno de México se reunió con sus homólogos de Honduras y Guatemala con la finalidad de implementar medidas para contener la migración. Además, el presidente Andrés Manuel López Obrador (AMLO), acordó con el Gobierno de los Estados Unidos un despliegue de más de 10.000 soldados en la frontera sur[1].  Desde el Gobierno mexicano se apuesta por una política migratoria de contención que continúo durante el mes de mayo.

Con las medidas tomadas en 2020 por México y Guatemala para la contención de la migración en la frontera sur, la presencia de la Guardia Nacional y el Instituto Nacional de Migración es ahora permanente. Se trata de puntos de control para que haya elementos presentes, y no de revisiones sistemáticas de control de documentación de viaje. Esta presencia busca monitorear la zona y en casos de sospecha, solicitar la documentación relevante. De igual forma, se encargan de dar atención a quienes soliciten refugio.

A finales de abril, el presidente AMLO se reunió con los gobernadores de Tabasco y Chiapas para dialogar sobre el aumento de presencia militar en la frontera sur de México con el objetivo de proteger a las personas migrantes, en particular a la niñez, y evitar potenciales situaciones negativas en contra de  esta población^[2].

A la estrategia de contención del Gobierno mexicano se suman los esfuerzos que se han hecho para extender el programa “Sembrando Vida”^[3] en El Salvador y Honduras. Durante diversas conferencias de prensa el mandatario ha expuesto que, en Honduras, 431 productores ya se encuentran sembrando árboles. Mientras que, en El Salvador ya son 1.070 productores inscritos en este programa^[4].

La reciente armonización de la “Ley de Migración” y la “Ley de Refugiados, Protección complementaria y Asilo Político en materia de infancia migrante”, en las que se define que las niñas, niños y adolescentes no pueden ser detenidos ni asegurados en estancias migratorias, ha generado una nueva dinámica en los flujos migratorios.

Informantes claves indican que, a partir del despliegue de la Guardia Nacional para la contención de la migración irregular en la frontera sur, las personas migrantes están optando por diversificar sus rutas migratorias para evitar la detención. Esta situación aumenta los riesgos de vulnerabilidad de las personas migrantes al exponerse a ser víctimas de trata de personas por parte de las redes de crimen organizado que operan en estos sectores.